Don Cecilio, el interventor de la Universidad Laboral, guardaba con celo, allá por los años sesenta del siglo pasado, la integridad de su calculadora. Aquella última tecnología estaba al alcance de muy pocos y nadie podía siquiera tocarla sin su permiso. Si alguien planteaba un problema de números, don Cecilio, siempre solícito, se aprestaba a solucionarlo con su \'computadora\', que más de una vez se atascaba ocasionándole dolores de cabeza incluso a los técnicos responsables de su mantenimiento. Todo era poco, en aquellos tiempos, para la Universidad Laboral. Ahora, aquel viejo aparato, como otros miles de objetos que formaron parte de la vida de la Laboral durante medio siglo, permanece almacenado en las estancias que fueran de los Jesuitas, en el propio edificio de Cabueñes, ubicadas entre la base de la torre y la parte trasera de la iglesia. Es un museo dentro de la denominada Ciudad de la Cultura que, al menos hasta ahora, permanece oculto y a la espera de tiempos mejores. La calculadora de don Cecilio, al menos, ha corrido mejor suerte. Otros muchos recuerdos y objetos de la Universidad Laboral han desaparecido en los años de semiabandono del emblemático edificio de Luis Moya o, incluso, aparecieron en algunos de los rastros de la vecina comunidad de Castilla y León.....(para seguir la noticia, clic aquí ) Par ver las piezas del "museo oculto", los tesoros olvidados ... una auténtica gozada , clic aquí
13-05-2024
19-12-2023
24-01-2023